Un total de 22 familias que después de una larga lucha lograron que el Gobierno adquiriera un sitio privado donde se habían asentado y levantaron sus casas de madera, esperan hace aproximadamente seis meses el acceso al título de propiedad y a los servicios esenciales como luz y agua
Además, temen que ocurra un siniestro debido a que hay más de diez familias “enganchadas” a un sólo cable que le abastece de energía eléctrica. En diálogo con Noticias y Canal 2, Joaquín Pedrozo, uno de los vecinos, relató: “estamos a la espera de los papeles del terreno y los servicios. Ya van seis meses que estamos en este lugar y todavía no tuvimos respuestas, ni siquiera tenemos servicio de luz que ya tenía que haber llegado al igual que el agua”. A su vez, comentó que momentáneamente están “enganchados a un cable, pero tenemos miedo de que se prenda fuego una casa porque con el calor aumenta el consumo. Es un cable de 2,5 milímetros del cual están prendidos 15 familias y todos usan la electricidad”, advirtió. Finalmente, pidió respuestas al Ministerio de Derechos Humanos: “nos dijeron que los trámites necesarios para el acceso a los servicios ya se hicieron, pero hasta el momento nadie vino a conectarlos”, subrayó.
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