El presidente de EE.UU. fue recibido por el premier Benjamín Netanyahu y afirmó que tiene confianza en lograr un pacto con los palestinos
“Es un honor estar aquí. Me honró ( por Netanyahu) con ser uno de los primeros líderes en visitar la Casa Blanca y ahora con recibirme aquí”, dijo Donald Trump, aún emocionado por la visita al Muro de los Lamentos. De hecho, esa experiencia -afirmó- la llevará consigo siempre. El mandatario estadounidense dijo que con su visita se refuerza "un lazo inquebrantable entre Israel y EE.UU.". Y agregó: "es posible un nuevo nivel de colaboración, con mayor seguridad para la región y para Estados Unidos, e incluye un esfuerzo renovado de paz entre israelíes y palestinos". El presidente de EE.UU. consideró también que alcanzar la paz "es muy difícil", al tiempo que subrayó estar convencido de que "puede lograrse". Por su parte, Netanyahu también se mostró exultante por el encuentro. "Estamos felices de recibirlo a usted y a Melania en Jerusalén, la eterna capital de los judíos. Nos conocemos hace muchos años y es siempre bueno verlo. También es hermoso ver la amistad entre nuestras esposas, Sara y Melania", aseguró el premier israelí, quien afirmó que "por primera vez en mucho tiempo" siente que hay un cambio. "Es una gran señal su visita", agregó. Netanyahu se mostró confiado en el comienzo de una nueva era en la relación bilateral: "juntos podemos detener la marcha terrorista de Irán y su ambición de ser una potencia nuclear".
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